Clínica de Dermatología y Estética
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En Bonaderma llevamos más de 20 años usando peelings para muchos problemas de la piel, ya sean de forma aislada o combinados con otras técnicas como IPL (luz pulsada) o microagujas.
El peeling es un procedimiento que consiste en la aplicación sobre la piel de una sustancia -o combinación de varias- habitualmente ácidos, que penetran de forma más o menos profunda.
Existen peelings superficiales, medios y profundos. Los más usados son los superficiales de salicílico, glicólico, láctico, retinoicos, etc...y los peelings medios de tricloroacético.
- Los peeling superficiales pueden producir descamación ligera ó rojez transitoria; los medios, costras que duran 7 a 14 días.
- El peeling profundo de fenol precisa anestesia general, monitorización cardíaca y formará costras durante varias semanas; por ello es poco usado.
Los peelings superficiales y medios son de utilidad en acné, mejora de cicatrices y textura de piel, disminución de grasa, léntigos, melasma, rosácea y fotoenvejecimiento; los podemos usar solos o combinados con luz pulsada (IPL) ó microagujas.
Podemos utilizar esta técnica para tratar:
No, hay escozor, ardor o picor transitorios.
No, dependerá del tipo de peelings y piel, forma y tiempo de aplicación, sellado, etc. Es una técnica muy mano dependiente y no siempre necesitamos producir descamación para mejorar.
En los léntigos solares va mejor luz pulsada (link) y láser de QSW (link); no obstante, muchas veces combinamos además peeling. En el melasma nuestro protocolo despigmentante (link) incluye siempre peeling.
Sí, porque usamos peelings que pueden ayudar a regular grasa y disminuir rojez, pero no sirve cualquier peeling y se necesita valoración previa individualizada.
