Las arrugas son depresiones en la piel debido a falta de elasticidad por pérdida de las fibras de colágeno y elastina que dan soporte a nuestra piel. Influye la genética, el sol recibido por la piel, los hábitos higiénicos como fumar, alcohol, alimentación, cuidados de la misma, etc. Existen arrugas que llamamos dinámicas que son las que nos aparecen al gesticular y otras que son en reposo. Actualmente existen muchos tratamientos para las arrugas. Los neuromoduladores van estupendamente en las arrugas de la frente, entrecejo y patas de gallo, proporcionando en pocos días un aspecto más relajado a nuestro rostro. Es un tratamiento muy seguro, eficaz Y QUE NO DISTORSIONA NUESTRA CARA. Los rellenos de hialurónico o hidroxiapatita sirven para arrugas nasogenianas -entre nariz, mejillas y labio superior, arrugas peribucales, además de que esos productos sirven para realzar pómulos, labios, etc. Siempre usamos sustancias h o sea que no dan problemas. Desgraciadamente los rostros “deformados” que vemos en revista de prensa es porque se han puesto productos permanentes –siliconas, etc- y no tienen ya solución… Esto se puede evitar fácilmente poniendo materiales temporales que sean de buena calidad y usándolos con MODERACIÓN. La filosofía de Bonaderma es mejorar nuestro aspecto y no “aparentar tener 25 años siempre”. Por último, otras técnicas como Láser fraccionado, láser fraccionado no ablativo 1565, mesoterapia de colágeno, hialurónico, vitaminas así como los Peeling y la Radiofrecuencia pueden ayudar a mejorar las arrugas faciales.
