La rosácea es un problema de la cara en el que aparece siempre rojez (cuperosis), pero también pueden aparecer algunos “granitos” (pápulas o pústulas) parecidos a los del acné, engrosamientos , fimas y capilares dilatados, que dan al rostro un aspecto inestético.
Afecta a mujeres y hombres, muchas veces tranquilos pero perfeccionistas y preocupados por todo su entorno. Los estados emocionales, calor, sol, calefacciones, bebidas calientes, alcohol, etc, agravan y hacen más patente el enrojecimiento facial, por lo que este trastorno acaba afectando la autoestima y calidad de vida del paciente.
Las mujeres suelen tener sensibilidad a muchas cremas, más por intolerancia que por auténtica alergia, y esto también perjudica la aparición de la rosácea.
En estos pacientes, aparte de la historia clínica y clasificación de su rosácea, es conveniente estudiar el grado de hidratación y sebometría de la piel para indicar los cosméticos adecuados.
¿Cómo lo tratamos?
Pueden ser necesarias:
- Cremas con metronidazol, ivermectina, retinoicos tópicos, etc;
- Antibióticos tópicos, orales o incluso isotretinoina oral, en algunos casos.
En Bonaderma disponemos de diversas técnicas para mejorar o eliminar la rosácea, aunque es una enfermedad difícil y de carácter crónico; usamos principalmente:
- Luz Pulsada
- LLLT o Luces Leds
- Láser de neodimio
- Peelings suaves
- Mascarillas astringentes
Tres sesiones con un intervalo mensual suelen ser necesarias para mejorar y comenzar a controlar la rosácea.
Consejo: “La rosácea es un problema que siempre debe ser evaluado por el dermatólogo; y la luz pulsada es de gran ayuda.”